La mejor manera para que los adolescentes mejoren en la conducción es pasar tiempo al volante, pero eso no significa que no haya limitaciones sobre cuándo deben conducir.
Ciertas condiciones pueden ser particularmente desafiantes para los conductores sin experiencia, incluida la conducción nocturna, con mucho tráfico y con mal tiempo. Si bien los nuevos conductores eventualmente necesitarán adquirir práctica en estas condiciones, es mejor comenzar despacio. Su hijo(a) adolescente debe practicar mucho en condiciones fáciles antes de pasar a las más difíciles. Tenga esto en cuenta mientras se prepara para las eventuales lecciones de manejo de su hijo(a) adolescente.
También debe evitar que su hijo(a) adolescente conduzca en situaciones de riesgo, como días festivos o donde hay eventos importantes. Imagínese las calles en una celebración típica del 4 de julio, por ejemplo. Seguro que habrá:
Es más probable que estos riesgos abrumen a los conductores inexpertos y aumenten el riesgo de accidentes, razón por la cual los adolescentes deben evitarlos. Tenga esto en cuenta durante la educación de manejo de su hijo(a) adolescente; aunque la experiencia es fundamental, no debe ser a expensas de la seguridad de su hijo(a) adolescente.
Practíquelo: Durante un próximo día festivo o gran evento, lleve a su hijo(a) adolescente a dar una vuelta, pero conduzca usted. Mientras conduce en medio del tráfico congestionado, pídale a su hijo(a) adolescente que le indique todos los riesgos que ve. Luego, una vez que llegue a casa, hable sobre estos peligros y explique por qué su hijo(a) adolescente debe evitarlos.
There are no items in your cart